Índice
- Materiales y Herramientas Necesarias
- Paso 1: Medir el Vano de la Puerta
- Paso 2: Seleccionar la Puerta y el Sistema Corredero
- Paso 3: Preparar la Pared
- Paso 4: Instalar el Riel Superior
- Paso 5: Colocar los Herrajes en la Puerta
- Paso 6: Montar la Puerta en el Riel
- Paso 7: Instalar la Guía Inferior
- Paso 8: Ajustar la Puerta
- Paso 9: Colocar los Topes de Final de Recorrido
- Paso 10: Añadir los Acabados Finales
Materiales y Herramientas Necesarias
Antes de comenzar, asegúrate de contar con los siguientes materiales y herramientas:
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Materiales:
- Puerta corredera del tamaño adecuado.
- Kit de herrajes para puerta corredera (riel, rodillos, topes, guía inferior).
- Tornillos y tacos adecuados al tipo de pared.
- Tapetas o molduras para cubrir el riel (opcional).
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Herramientas:
- Taladro con brocas para madera y pared.
- Destornillador o atornillador eléctrico.
- Nivel de burbuja.
- Cinta métrica.
- Lápiz para marcar.
- Llave inglesa o juego de llaves.
- Sierra para cortar molduras (si es necesario).
Paso 1: Medir el espacio de la Puerta
Comienza midiendo el ancho y la altura del vano donde instalarás la puerta. Es fundamental que la puerta sea más ancha que el espacio para asegurar una cobertura completa al cerrarse. Generalmente, se recomienda que la puerta sea entre 5 y 10 cm más ancha.
Paso 2: Seleccionar la Puerta y el Sistema Corredero
Elige una puerta que se adapte al estilo de tu hogar y que cumpla con las medidas tomadas. Además, selecciona un sistema corredero que soporte el peso de la puerta y que sea compatible con sus dimensiones. Los kits suelen especificar el peso máximo que pueden soportar.
Paso 3: Preparar la Pared
Determina si la pared donde instalarás el riel es de material sólido o hueco. En paredes de yeso laminado, es esencial localizar los montantes para fijar el riel de manera segura. Marca la altura a la que instalarás el riel, asegurándote de que haya suficiente espacio para que la puerta se desplace sin obstáculos.
Paso 4: Instalar el Riel Superior
Con la ayuda del nivel de burbuja, marca la línea horizontal donde fijarás el riel. Taladra los agujeros correspondientes y coloca los tacos si es necesario. Atornilla el riel a la pared, asegurándote de que esté perfectamente nivelado para garantizar un deslizamiento suave de la puerta. En el caso de los casonetos, este paso lo hace el albañil al levantar el muro insertando el casoneto.
Nivel de burbujas ➔
Por experiencia sabemos que muchas veces aquí hay fallos. Asegúrate de que el casoneto esté instalado de tal forma que luego al colocar la puerta, esta no roce el suelo y a la vez no esté muy suspendida. Debe haber el espacio justo. Una comunicación fluida con el albañil te ayudará a asegurar este paso.
Paso 5: Colocar los Herrajes en la Puerta
Fija los soportes o rodillos en la parte superior de la puerta, siguiendo las instrucciones del fabricante. Asegúrate de que estén bien alineados y firmemente sujetos, ya que soportarán el peso de la puerta durante su movimiento.
Paso 6: Montar la Puerta en el Riel
Coloca las ruedas y el tope en el riel y con la ayuda de otra persona, levanta la puerta y engancha los rodillos en el riel superior.
Asegúrate de que la puerta se desplace suavemente a lo largo del riel. Este paso puede ser más sencillo si retiras temporalmente los topes del riel y los vuelves a colocar una vez que la puerta esté en su lugar.
Paso 7: Instalar la Guía Inferior
La guía inferior evita que la puerta se balancee o golpee la pared al deslizarse. Marca la posición de la guía en el suelo, asegurándote de que esté alineada con el riel superior. Fija la guía al suelo utilizando tornillos y tacos adecuados, según el tipo de superficie.
Paso 8: Ajustar la Puerta
Una vez instalada la puerta en el riel, es fundamental asegurarse de que esté nivelada y se desplace suavemente. Para ello:
- Utiliza el nivel de burbuja para verificar la verticalidad y horizontalidad de la puerta.
- Si la puerta está desalineada, ajusta los rodillos superiores según las indicaciones del fabricante. Generalmente, esto implica girar un tornillo de ajuste que eleva o baja la puerta.
- Comprueba que la puerta se desplace sin obstáculos a lo largo de todo el riel.
Paso 9: Colocar los Topes de Final de Recorrido
Los topes son esenciales para limitar el recorrido de la puerta y evitar que se salga del riel o golpee las paredes. Para instalarlos:
- Desliza la puerta hasta la posición deseada de apertura y cierre.
- Marca en el riel superior los puntos donde deseas que la puerta se detenga.
- Fija los topes en estos puntos, siguiendo las instrucciones del fabricante. Asegúrate de que estén bien sujetos para soportar el uso diario.
Paso 10: Añadir los Acabados Finales
Para lograr un resultado estético y funcional:
- Instala las tapetas o molduras para cubrir el riel superior, si lo deseas. Esto proporcionará un acabado más limpio y ocultará los herrajes.
- Coloca los embellecedores en los puntos de fijación visibles para mejorar la apariencia.
- Si la puerta no incluye un tirador, instala uno adecuado para facilitar su uso. Asegúrate de que no interfiera con el deslizamiento de la puerta.
Consejos Adicionales
- Seguridad: Siempre utiliza equipo de protección personal, como guantes y gafas de seguridad, al utilizar herramientas eléctricas.
- Precisión: Tómate el tiempo necesario para medir y marcar con precisión. Una instalación cuidadosa garantiza un funcionamiento óptimo de la puerta.
- Mantenimiento: Lubrica periódicamente los rodillos y el riel para asegurar un deslizamiento suave y prolongar la vida útil del sistema.
Conclusión
Instalar una puerta corredera puede parecer una tarea desafiante, pero siguiendo estos pasos detallados, podrás llevar a cabo el proyecto con éxito. No solo optimizarás el espacio en tu hogar, sino que también añadirás un elemento estético y funcional que mejorará la distribución y el flujo de las habitaciones.